Encerrado en una ciudad

Nunca pensé que llegaría a tener esta sensación: estar en un sitio y no poder salir de él. Día tras día las mismas cuestas, los mismos semáforos, las mismas casas. Los coches atascados en los mismos sitios y las caras repetidas de las mismas personas y sus miradas perdidas.

Perder la noción del tiempo y pensar que no tienes escapatoria. Los días se repetían y no notaba ningún avance, era un bucle sin fin y tenía la sensación de estar al margen de la historia. El desanimo se apoderó de mí, pero al final parece que el sol se acaba por imponer a las nubes y un pequeño rayo de esperanza surge de entre ellas.

Al final pude escapar y poder abandonar esa extraña rutina, pero me fui con la sensación de que esa ciudad podría volverme a atrapar en cualquier momento.

Ahora estoy atrapado en la ciudad de siempre pero al menos el tiempo parece avanzar...